De la mano de la Virgen María se han visto milagros.
Ella es camino seguro de salvación.
Imagínate, llegar a la presencia de Jesús y que te diga:
¨mi Madre me ha hablado mucho de ti¨.
¡Escóndete bajo su manto! ¡Abrázala! ¡Síguela!... ¡cántale!... ¡bésala!
¡sonríele como un niño! Ella te ama como tal.
¡Eres su hijo amado!
Sin ti, Mamá, todo sería diferente...
¡Te amo! y toco tu mano con el profundo sentir de mi alma.